lunes, 26 de marzo de 2012

Extractos del "Denzinger" III


Del socialismo
[De la Encíclica Quod Apostolici muneris, de 28 de diciembre de 1878]
Nota: (3) ASS 11 (1878) 372 ss; AL I 49 s.



D-1849 Según las enseñanzas del Evangelio, la igualdad de los hombres consiste en que, habiéndoles a todos cabido en suerte la misma naturaleza, todos son llamados a la dignidad altísima de hijos de Dios, y juntamente en que, habiéndose señalado a todos un solo mismo fin, todos han de ser juzgados por la misma ley para conseguir, según sus merecimientos, el castigo o la recompensa.
Sin embargo, la desigualdad de derecho y poder dimana del autor mismo de la naturaleza, de quien toda paternidad recibe su nombre en el cielo y en la tierra [Efesios. 3, 15]. Ahora bien, de tal manera se enlazan entre sí por mutuos deberes y derechos, según la doctrina y preceptos católicos, las mentes de los príncipes y de los súbditos que por una parte se templa la ambición de mando, y por otra se hace fácil, firme y nobilísima la razón de la obediencia...

D-1850 Sin embargo, si alguna vez se diere el caso de que la pública potestad sea ejercida por los príncipes temerariamente y traspasando sus límites, la doctrina de la Iglesia Católica no permite levantarse por propia cuenta contra ellos, a fin de que no se perturbe más y más la tranquilidad del orden o de ahí reciba la sociedad mayor daño; y cuando la cosa llegare a términos que no brille otra esperanza de salvación, enseña que ha de acelerarse el remedio con los méritos de la paciencia cristiana y con instantes oraciones a Dios. Pero si los decretos de los legisladores y príncipes sancionaran o mandaran algo que repugne a la ley divina o natural, la dignidad y el deber del hombre cristiano y la sentencia apostólica persuaden que se debe obedecer más a Dios que a los hombres [Hechos. 5, 29].

D-1851 Mas la sabiduría católica, apoyada en los preceptos de la ley divina y natural, ha provisto también prudentísimamente a la tranquilidad pública y doméstica por su sentir y doctrina acerca del derecho de propiedad y la repartición de los bienes que han sido adquiridos para lo necesario o útil a la vida. Porque mientras los socialistas acusan al derecho de propiedad como invención que repugna a la igualdad natural de los hombres y, procurando la comunidad de bienes, piensan que no debe sufrirse con paciencia la pobreza y que pueden impunemente violarse las posesiones y derechos de los ricos; la Iglesia, con más acierto y utilidad, reconoce la desigualdad entre los hombres naturalmente desemejantes en fuerzas de cuerpo y de espíritu aun en la posesión de los bienes, y manda que cada uno tenga, intacto e inviolado, el derecho de propiedad y dominio, que viene de la misma naturaleza. Porque sabe la Iglesia que el hurto y la rapiña de tal modo están prohibidos por Dios, autor y vengador de todo dereco, que no es lícito ni aun desear lo ajeno, y que los ladrones rapaces, no menos que los adúlteros e idólatras, están excluídos del reino de los cielos [1 Corintos. 6, 9 s].

D-1852 No por eso, sin embargo, descuida el cuidado de los pobres u omite acudir como piadosa madre a las necesidades de aquéllos antes bien, abrazándolos con maternal afecto, y sabiendo muy bien que representan la persona de Cristo mismo, que tiene por hecho a sí mismo aun el más pequeño beneficio que se preste a cualquiera de los pobres, los tiene en grande honor y los alivia con la ayuda que puede; cuida de que en todas las partes de la tierra se levanten casas y hospicios para recogerlos, alimentarlos y cuidarlos y toma tales instituciones bajo su tutela. A los ricos, aprémialos con gravísimo mandamiento de que den lo superfluo a los pobres y les amenaza con el juicio divino que ha de condenarlos a los suplicios eternos, si no socorren la necesidad de los pobres. Finalmente, ella alivia y consuela sobremanera las almas de los pobres, ora poniéndoles delante el ejemplo de Cristo que, siendo rico, se hizo pobre por amor nuestro [2 Corintos. 8, 9]; ora recordándoles las palabras del mismo Cristo, por las que delaró bienaventurados los pobres [Ev. Sn Mateo. 5, 3] y les mandó esperar los premios de la eterna bienaventuranza.

Además de la misma encíclia Quod Apostolici muneris

Empero, aunque los socialistas, abusando del mismo Evangelio para engañar más fácilmente a incautos, acostumbran a forzarlo adaptándolo a sus intenciones, con todo hay tan grande diferencia entre sus perversos dogmas y la purísima doctrina de Cristo, que no puede ser mayor. Porque ¿qué participación puede haber de la justicia con la iniquidad, o qué consorcio de la luz con las tinieblas? [2 Corintos 6,14.] Ellos seguramente no cesan de vociferar, como hemos insinuado, que todos los hombres son entre sí por naturaleza iguales; y, por lo tanto, sostienen que ni se debe honor y reverencia a la majestad, ni a las leyes, a no ser acaso a las sancionadas por ellos a su arbitrio.



Fuentes:
http://www.statveritas.com.ar/Magisterio%20de%20la%20Iglesia/Magisterio%20de%20los%20Papas/Magisterio%20Leon%20XIII/Quod%20Apostolici%20Muneris.htm
http://www.unavocesevilla.info/denzinger.pdf


viernes, 16 de marzo de 2012

Correa el satánico otra vez

Visita de Rafael Correa a Turquía en donde presentó honores al "padre de la nación turca" Kemal Atatürk, uno de los responsables del genocidio armenio, el cual continuó durante su gobierno "Kemal Atatürk fallece en Estambul el 10 de Noviembre de 1938 dejándole a la 'refundada y moderna' República de Turquía, una nefasta carga: ser el Estado que directamente debe responder por el genocidio de un millón y medio de armenios"


Dumpt.com

No te preocupes Rafael tu también puedes tener un mausoleo igualito al de tu admirado líder turco, tan solo tienes que matar un millon y medio de cristianos, y ya muchos han derramado su sangre por tu ineptitud y corrupción, aunque, ¿quien sabe? tal vez no existan tantos cristianos en el Ecuador

Fuentes
http://www.genocidioarmenio.org/nota.asp?id=4


Fotos del orgulloso Correa en la cuenta de flickr de la Presidencia de la República
http://www.flickr.com/photos/presidenciaecuador/6984432069/in/photostream

domingo, 11 de marzo de 2012

San Gregorio Magno

El 12 de marzo se recuerda la fundación de la ciudad de Portoviejo, en 1535 los españoles realizaron la fundación y como era costumbre suya pusieron la ciudad bajo el patronato del Santo que se conmemoraba en aquel día, si en la actualidad buscamos en el santoral, no encontraremos a San Gregorio, puesto que fue cambiado de fecha, junto con otros muchos santos, después de las modificaciones realizadas post vaticano segundo, lastimosamente San Gregorio es poco conocido aquí en Portoviejo.



Nacido en 540 en Roma, murió en la misma ciudad en 604, fue nombrado Pretor de Roma decidió sin embargo dejar los honores del mundo, después de un periodo de indecisión, recibió la providencial ayuda de los monjes benedictinos Constancio y Simplicio, además de los consejos que le llegaban por su correspondencia con San Leandro de Sevilla, una vez decidido, vendió sus bienes, y convirtió su palacio del monte Celio en un monasterio, en donde se dedicó al estudio de la Sagrada Biblia y buscando la contemplación y la compunción de corazón, su paz monacal fue interrumpida por el Papa Benedicto I quien lo envió como nuncio (apocrisario) de Constantinopla, siendo confirmado por el siguiente Papa Pelagio III, a su retorno las cosas irían empeorando para la ciudad de Roma, victima ahora de una terrible peste, que entre muchas otras víctimas, cobró la vida del Papa, ante lo cual San Gregorio fue elegido para sucederlo, él que buscaba la soledad del monacato, fue reacio a aceptar, sin embargo convencido de ser esta la voluntad de Dios, en seguida comenzó su trabajo publicando la "Regula Pastoralis" un verdadero código para los obispos, y basada en la Regla de San Benito, hecha para los monjes, así el nuevo Papa es ante todo el pastor de Roma allí indica que el pastor sea puro en sus pensamientos, intachable en sus obras, discreto en el silencio, provechoso en las palabras, compasivo con todos, más que todos levantado en la contemplación, compañero de los buenos por la humildad y firme en velar por la justicia contra los vicios de los delincuentes. Que la ocupación de las cosas exteriores no disminuya el cuidado de las interiores y el cuidado de las interiores no le impida el proveer a las exteriores".

Sin embargo su actividad no solo era para su ciudad, no descuidó su obligación apostólica en el resto de la península italiana, y en los demás territorios, desde Africa, hasta las actuales, Francia, España, Alemania, además de un permanente contacto con el Imperio Bizantino en el Oriente, especialmente destaca la labor de Inglaterra, la llegada de misioneros que actuan providencialmente, volviendo la isla, especialmente el sur, a la Religión Católica, en brevísimo tiempo

Extendió su labor apostólica, al pueblo, escribió 40 homilías sobre el Evangelio leyendo el la mitad, dejando las demás a sus obispos debido a su mal estado de salud, fue un prolífico escritor, dejando más obras que cualquier otro Sumo Pontífice durante la Edad Media, entre ellas el Libro de la regla pastoral, Los "Diálogos" con el subtitulo "Vida y milagros de santos italianos e inmortalidad de las almas", Las "Morales" un gran comentario de la historia de Job, Las Veintidós "Homilías sobre Ezequiel", "explicaciones de textos del Antiguo y Nuevo Testamento" incluyendo un amplio epistolario de 848 cartas, sin contar aquellas que se perdieron, de donde se trasluce la influencia de los principios de San Agustín en la obra "Ciudad de Dios" homilías, comentarios, etc.

Además se esmeró en que también el pueblo realizara las practicas de piedad, las buenas obras, las devociones, el culto a las reliquias

También introdujo las doctrinas, introdujo una serie de reformas en la liturgia que ha hecho famoso el Sacramentario gregoriano. Mandó se dijese alleluia fuera del tiempo de Pentecostés; que se cantase el kyrie eleison; que el Pater nosterse recitase después del canon

Realizó la reforma que aún lleva su nombre, el canto gregoriano. San Gregorio restauró y renovó la Schola cantorum y compiló el antifonario, llegando así a ser un centro superior de cultura musical, y seminario del clero romano. continuar la reforma, fue esencial y el éxito es inexplicable sin su espíritu renovador y su autoridad. Gracias a él se aunaron los diversos cantos en una sola liturgia. haciendo una verdadera restauración y ordenamiento del canto eclesiástico, en un momento crítico de la historia de Europa, durante siglos fue el canto eclesiástico común en el mundo católico.

San Gregorio es uno de los cuatro doctores originales de la Iglesia Occidental, junto con con San Ambrosio, San Agustín y San Jerónimo.

Oración a San Gregorio
Oh Dios, que habéis concedido al alma de vuestro siervo San Gregorio las recompensas de la beatitud eterna, haced, benignamente, que sus oraciones junto a Vos nos libren del peso abrumador de nuestros pecados. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amen